Es una obra poética que explora temas de fortuna, amor y sueños. La letra está impregnada de imágenes oníricas y metáforas que invitan al oyente a un viaje introspectivo y reflexivo. Desde el inicio, la canción establece un escenario casi mágico, ’en el claro de la luna’, un lugar donde la Reina Fortuna duerme y debe madrugar, sugiriendo la dualidad entre el descanso y la actividad, la suerte y el esfuerzo.
Silvio Rodríguez, conocido por su estilo lírico y su capacidad para tejer narrativas complejas, utiliza en esta canción una serie de metáforas para hablar sobre la suerte y el amor. La ’Reina Fortuna’ es una figura protectora que, en sus sueños, guarda la suerte del narrador, salvándolo de la muerte y brindándole fortuna en el amor. Esta personificación de la suerte como una guardiana que sueña rodeada de flores añade una capa de misticismo y esperanza a la canción.
A lo largo de la letra, el narrador pide a su talismán que sueñe con diferentes elementos: caballos cerreros, viento del sur, y un tiempo de aguaceros en el valle de la luz. Estas imágenes evocan libertad, naturaleza y renovación. Además, el narrador expresa un deseo profundo de que sus sueños y anhelos se hagan realidad, incluso aquellos que no se dicen en voz alta. La canción culmina con una reflexión sobre el paso del tiempo y la vida, donde el narrador sueña con el día de mañana, ya que lo tiene soñado hoy, mostrando una conexión entre el presente y el futuro a través de los sueños.
’En El Claro De La Luna’ es una canción que invita a la introspección y a la contemplación de la vida y sus misterios. Silvio Rodríguez, con su estilo característico, logra crear una atmósfera mágica y reflexiva, donde los sueños y la fortuna se entrelazan en un claro de luna lleno de poesía y simbolismo.