El compositor venezolano Juan Bautista Plaza (1898-1965) tiene en su haber unas cincuenta obras para piano, con las cuales realizó una innegable contribución al repertorio pianístico venezolano. Pero su aporte real no está precisamente en la cantidad de obras sino en las características nacionalistas de un reducido número de ellas. Posiblemente por considerarlas piezas de juventud o de estudio, Plaza excluyó de su catálogo todas las obras fechadas antes y durante su viaje de estudio en Roma (1920-23).
La Sonatina Venezolana, los Cuatro ritmos de danza y el Contrapunto Tuyero son los máximos exponentes de la obra pianística de Plaza que en su madurez tuvo como pensamiento estético el nacionalismo. En ellas el autor hizo gala de su más sublime empleo del elemento folklórico como fuente de inspiración, pero lejos de citar directamente el ritmo, la melodía o la forma de algún género popular en particular, el compositor c