LA DESCOOPERATIVIZACIÓN COMO INCENTIVO INVERSOR
1. No es un capricho el que la legislación cooperativa establezca requisitos estrictos para contener la “descooperativización” de las sociedades cooperativas. Ya sea mediante la transformación en sociedades de capitales, mediante la contratación de asalariados o mediante la canalización de actividades a través de filiales, existe un importante incentivo económico para que las empresas autogestionadas dejen de serlo, de forma total o parcial. Por las mismas razones, el incentivo de canalizar las nuevas inversiones a través de mecanismos “descooperativizados” es altísimo.
2. Precisamente por ello, los instrumentos de “descooperativización” pueden, en la práctica, constituirse como un interesante elemento para aumentar el incentivo inversor de las cooperativas. Recordemos que las cooperativas tienen un alto incentivo inversor para las inversiones defensivas y un incentivo más bajo que las so