Richard Strauss - Así habló Zaratustra Orquesta Filarmónica de Berlín - Herbert von Karajan
Richard Strauss, Also sprach Zarathustra (Così parlò Zarathustra). Op. 30
“Orquesta Filarmónica de Berlín dirigida por Herbert von Karajan (1983?)
Análisis completo en
nº 1. Prólogo de Zaratustra (00:28). [Zaratustra anuncia la llegada del superhombre].
Strauss expone el célebre motivo del superhombre en la trompeta.
nº 2. De los trasmundanos (02:06). [Nietzsche describe el tiempo en el que los hombres creían en un dios “sufriente y atormentado”].
Strauss cita diversos motivos gregorianos (02:48) y entona el coral de cuerdas que podría representar el estadio del “camello” (03:00).
nº 3. Del gran anhelo (05:38). [En el libro encontramos una oda al alma liberada de servidumbres pasadas].
Strauss reinterpreta las citas del canto gregoriano (06:20) y el coral del episodio anterior (06:59) en un contexto de desarrollo y crisis, azuzados por el motivo del superhombre.
nº 4. De las alegrías y las pasiones (07:45). [Zaratustra explica que las pasiones son el pecado para el hombre religioso, pero para el hombre libre son la virtud].
Strauss expone una apasionada y tortuosa melodía que podría representar una lucha interior, o el estadio del “león”.
nº 5. La canción de los sepulcros (10:06). [En el libro, Zaratustra rememora la juventud pasada como un objeto “muerto”].
Strauss reinterpreta la melodía del número anterior en un contexto de desarrollo. Le sigue una transición en diminuendo al siguiente número.
nº 6. De la ciencia (12:54). [El libro muestra al “concienzudo” y a Zaratustra rebatiendo los cantos de sirena del “mago”].
Strauss desarrolla una densa y oscura fuga a partir del motivo del superhombre. La fuga es interrumpida por una visión fugaz de la “canción del noctámbulo“ (15:53) y la “canción del baile” (16:16) y continúa con una transición (16:36) al siguiente número.
nº 7. El convaleciente (17:40). [Zaratustra despierta una mañana exaltado y permanece una semana inmovilizado sin comer siquiera. Tras recuperarse de la extraña enfermedad, confía a los animales su renovada conciencia del eterno retorno de las cosas].
Strauss continúa la fuga del episodio anterior, ahora en ritmo vivo y ascendiendo hacia un aparatoso clímax. A continuación, se inicia una transición (19:26) que actúa como introducción al siguiente número.
nº 8. La canción del baile (23:02). [Zaratustra y sus discípulos encuentran un día un grupo de muchachas bailando. Entona una canción para acompañar su baile, en la que contrapone la fría sabiduría a la juventud y belleza de las danzarinas. Al acabar la canción, Zaratustra se siente triste ante la llegada del ocaso].
Strauss confía al violín solista la dirección de una dionisíaca danza (23:30, que podría representar el estadio del “niño”), a la que sigue un desarrollo de ésta (27:13) que conducirá a un aparatoso clímax.
nº 9. La canción del noctámbulo (31:24). [Tras celebrar una fiesta, Zaratustra y sus acompañantes salen de la cueva a contemplar la noche. El hombre “feo” agradece a Zaratustra haberle enseñado a amar la vida. Suenan las campanadas de la medianoche y Zaratustra se siente invadido por una extraña melancolía].
En el poema sinfónico, el clímax de la sección anterior es interrumpido por el toque de las campanas. Una última melodía de carácter elegíaco (32:37), confiada a la cuerda, conduce la obra a un sereno final (35:26) en el cual alternan los acordes de Do mayor y Si mayor a modo de enigma.“